
Y vaya que
la experiencia ha sido de emoción. Para empezar me enteré a última hora de la
existencia del evento. Inmediatamente después de ver el link que me habían
enviado con la info del evento me dispuse a registrarme, pero fueron surgiendo
cosas que me impedían terminar de completar el formulario y el tiempo de llenado
se agotaba una y otra vez. Cuando por fin logre tener tiempo de hacerlo con
calma solo quedaba un lugar disponible y pensé que no seria capaz de lograrlo, pero lo hice.

Para los
que no tienen idea les cuento, Startup Weekend es (ahora lo se y lo he vivido) un
evento de 54 horas que proporcionan una experiencia educativa superior para
emprendedores de todos los ámbitos. Está centrado en acción, innovación y
educación. Comenzando con la presentación de ideas el viernes por la noche,
continuando con el desarrollo de un modelo de negocio, validación de mercado y
la creación de un prototipo básico funcional, Startup Weekend culmina el
domingo con la demostración de los proyectos ante un panel de inversionistas y
emprendedores locales. Los participantes tienen el reto de construir startups
funcionales durante el fin de semana, mediante la colaboración con personas
ajenas a su entorno cotidiano, pero con ideas y talentos similares y
complementarios.
Ademas de
trabajar con gente con diferentes personalidades y de diversas formaciones,
existe un grupo de coaches que brindan asesoría personalizada a cada proyecto,
ademas de dar conferencias sobre sus áreas de conocimiento y sobre herramientas
que ayudan a facilitar las tareas a realizar.

En mi caso participé en un proyecto sobre servicios de diseño interior on-line, el cual fue evolucionando (e involucionando en algunas ocasiones ) gracias a la colaboración del equipo, el cual fue genial gracias a su multidisciplinariedad, diferencia de edades y géneros.
Cada uno
de los integrantes compartió ideas,
conocimientos y experiencias que ayudaban a realizar el trabajo en curso, al
mismo tiempo que enriquecían la vida de los demás miembros.
Al final
nuestro trabajo se vio recompensado quedando seleccionados dentro de los
equipos ganadores del evento. Se nos designó el segundo lugar, pero eso no
quiere decir que seamos mejores que los demás, o peores que otros, simplemente
conseguimos vender una idea aplicando las herramientas que se nos dieron a conocer
durante el evento y cualquiera lo puede lograr.
La
experiencia ha sido muy buena y divertida, a pesar de los momentos de discusión
y estrés generados por la misma
diversidad de caracteres en el equipo, pero así es la vida y hay que disfrutar
cada momento de ella.
Si tienen
oportunidad de asistir a un Startup Weekend no se lo piensen, hagan tiempo para
divertirse. Y si tienen la misma suerte que nosotros, comerán muy rico durante
todo el fin de semana.