Breathe and reboot...

Como buen fan de Sex and the City he visto las seis temporadas (varias veces), las dos pelis, he memorizado diálogos e incorporado a mi vocabulario muchas de las frases usadas por los personajes.

Una de mis frases favoritas es de Carrie y dice lo siguiente:

“After all, computers crash, people die, relationships fall apart. The best we can do is breathe and reboot.” 

Desde el inicio de semana he estado recordando esta frase constantemente e intentado escribir algo al respecto, pero no he conseguido aterrizar mis ideas hasta hoy.

Muchas cosas pueden cambiar de la noche a la mañana, y lo normal es que no estemos preparados para esos cambios. Nosotros mismos cambiamos constantemente debido a  una serie de experiencias que nos estimulan, afectan y forman nuestro carácter.

Suena muy fácil decir que ante todas esas situaciones lo mejor que podemos hacer es respirar, calmarnos y reiniciarnos como una computadora. Pero aun el ordenador  almacena datos y genera un historial al cual se puede acceder después de ser reiniciado, de la misma forma que nuestras vivencias quedan registradas en nuestra memoria. Algunos de esos recuerdos quedan almacenados en carpetas de fácil acceso, pero otros se convierten en archivos ocultos que podemos ignorar pero que están en nuestro banco de datos, y alguna vez los encontraremos por casualidad, o porque activamos algún comando que los hace resurgir de su escondite.

Nunca sabemos lo que tenemos, hasta que hacemos limpieza. Cuando tocamos una de esas pilas de documentos y decidimos ver que es lo que hay ahí, es cuando nos podemos llevar todo tipo de sorpresas.

Creo que lo mejor es procurar no intentar ocultar las cosas a las que no queremos  enfrentarnos, sino resolver lo antes posible esos conflictos internos que pueden ser el detonante de un fatal error en el futuro. No es algo que resulte fácil, y muchas veces el proceso es hasta cierto punto doloroso, pero al final ayudará a evitar un mal mayor.

Evita guardar rencor, perdona a los que te ofenden, no te compares, no juzgues, piensa antes de hablar, aprende de tus errores y evita cometer los errores de los demás (recuerda que más fácil cae un hablador que un cojo).

Ten en cuenta que en caso de fatal error siempre se puede respirar y reiniciar, pero con la finalidad de buscar la raíz de la avería y aplicar la opción DELETE.